China y las debilidades del ciclo económico
Una de las primeras entradas en este blog trató sobre el ascenso económico de China y se planteó la pregunta de si era un mito o una realidad. Desde el año 2003 el mundo comenzó a ver un aumento considerable en todos los indicadores macroeconómicos derivados de las agresivas políticas impulsadas por el gobierno de Hu Jintao, en donde el plan prioritario era un crecimiento sostenido, mientras más durara, mejor.
El punto más álgido de crecimiento se dio en el 2008, año en el que se dieron dos eventos relevantes: un levantamiento violentamente aplastado en el Tíbet y las Olimpiadas, en las cuales hubo evidencia de que efectivamente, China había crecido bastante y que tenían una infraestructura de buena calidad. Los logros en términos de infraestructura sí son irrefutables al menos en el aspecto físico, aunque el aspecto funcional, operacional y en temas como mejora de calidad de vida, y el costo humano de este crecimiento acelerado, son asuntos muy aparte.
Los resultados de este crecimiento y estos logros no tardaron mucho en resonar en el mundo, puesto que la manera en la que China interactúa con la comunidad internacional cambió radicalmente, y un buen ejemplo del antes y después (entre muchos otros) fue cuando ingresó a la Organización Mundial del Comercio en 2001, cuando había un tono más conciliador en términos de diplomacia económica y aún así, muchos miembros se opusieron a su ingreso.
A pesar de las dudas, China ingresó a la Organización. Es importante mencionar que, aparte de tener indicadores económicos sólidos y una política en donde se da por hecho que se respetarán las medidas creadas en torno a crear un ambiente propicio para el comercio, los países deben respetar el marco legal de los tratados que celebren, así como también seguir otros estatutos como la Propiedad Intelectual y las reglas de sana competencia. Es de sentido común el que seguir los marcos legales y las reglas para la competencia sana, busquen evitar problemas al largo plazo, y por 'problemas' podemos ir desde el bloqueo hasta el boycott comercial, y es que a nadie le gusta que lo engañen.
En los años siguientes sin embargo, se dieron una variedad de eventos entre comerciales, diplomáticos y de derechos humanos que llevaron a la comunidad internacional ver el milagro económico de China con cierta reserva, y el punto de quiebre fue precisamente la caída de la bolsa hace algunas semanas. Hay diversos factores que pueden provocar una crisis económica, aunque el más común es el de gastar más de lo previsto o simplemente, gastar más de lo que se tiene, o como en el caso de Estados Unidos, literalmente vivir en una burbuja crediticia. El peor de todos los escenarios es el tener 'dinero teórico' sin respaldo de 'dinero práctico'. Mencionaré brevemente los factores que, personalmente, considero relevantes para analizar la crisis en China.
En primer lugar está la cantidad impresionante que China invirtió en las Olimpiadas de 2008, y es que según datos del Fondo Monetario Internacional, China tenía finanzas estables desde la salida Jiang Zemin, sin embargo en el año 2009 se ve un déficit comercial resumido en un balance negativo de su cuenta corriente, y aunque hubo intentos por disminuir esta deuda, el déficit continuó casi hasta el último año. A pesar de las agresivas jornadas de trabajo, el incremento de producción de bienes, incentivos para la inversión extranjera, y la provisión de servicios financieros, actualmente el saldo continúa siendo negativo.
En segundo lugar está el tema de que un gobierno puede invertir en infraestructura e incentivar el consumo en el mercado interno, sin embargo esto no funciona si la población no cuenta con un salario superior al 'necesario para subsistir'. Según datos de años anteriores, los ciudadanos chinos promedio ganan alrededor de 6000 USD por año, y pasan dos cosas: la vida en las ciudades chinas grandes y cosmopolitas (como Beijing, Shanghai, Chengdu, entre otras) es sumamente cara, y ni qué decir sobre otras metrópolis como Macau y Hong Kong, en donde las tiendas de marca son sólo para verlas, puesto que los precios están muy inflados.
La otra es que el precio de la vivienda es todavía un asunto mucho más delicado, puesto que una mayoría considerable de trabajadores chinos viven en cuartos (rentados) pequeños dentro de casas o condominios más grandes, y ellos mencionan que una propiedad de las que tanto presumen los altos mandos del país, cuesta alrededor de 10,000 USD por lo menos (en este caso hablamos de propiedades en ciudades medianas, en ciudades grandes el precio es mayor). Los centros comerciales 'fantasma' son otro buen ejemplo de este asunto de la insuficiencia de recursos para emprender negocios o para comprar un local para un negocio. Salvo por personas que llevan muchos años comprando o vendiendo bienes y servicios, comenzar un negocio no es nada fácil, sobretodo cuando los costos para emprender son tal altos. Los precios de estos locales comerciales son muy altos, puesto que los únicos que han podido costearlos son las marcas de lujo occidentales.
Ahora, en términos de bienes y servicios, los tiempos en los que China solía ser un país de bienes baratos y con todas las calidades, ahora son de bienes de todas las calidades (en donde aún hay que buscarle mucho para encontrar la mejor) pero todas con precios muy altos. El mejor ejemplo son las imitaciones de las marcas, en donde prácticamente la calidad (y el precio) dependen del vendedor. Cuando el nivel medio de ingreso en una población es inferior al costo de vida, la economía comienza a desacelerarse, y en algún punto puede estancarse o colapsarse. Este modelo de invertir en viviendas, centros comerciales, etc. es una idea que actualmente ha hecho de Corea del Sur un país considerablemente rico, aunque en el caso de los coreanos, tienen los dos elementos necesarios para que sobrevivan: un buen nivel de ingreso
En tercer lugar están las prácticas desleales de comercio, las cuales pueden provocar el rompimiento de tratados, el cierre de negocios, el cese de actividad comercial, entre otros. Entablar relaciones con un socio que buscará ganar a toda costa aunque esto implique manipular el tipo de cambio o no cumplir con lo establecido o salir con 'claúsulas ocultas' o copiar productos, no es un buen negocio en el largo plazo. Otro inconveniente de los negocios chinos en el extranjero, es que a donde se establecen muchos tienen preferencia para contratar personas de su misma nacionalidad, lo cual lleva a los locales al rezago y desde luego, a sentirse discriminados.
En cuarto y último lugar es el querer crecer y hacerse de recursos a punta de atropellos y desconsideraciones o de querer reinventar lo ya probado y establecido. Los que más sufrirán a raíz de esta crisis será el mismo pueblo chino, y es que aunado a todo lo anterior, son blanco de ataques y de insultos en el extranjero, principalmente por el comportamiento que muchos tienen como socios comerciales y como turistas.
El que también el gobierno quiera producir tecnología y bienes en masa sin importar los trabajadores, sus derechos y hasta las regulaciones sanitarias y de seguridad, son otro importante aspecto que perjudicará al pueblo chino en el corto plazo, ya que temas que van desde los problemas logísticos en los aeropuertos y hechos tan lamentables como el de Tianjing hasta la mala calidad de muchos productos, son sólo una muestra de lo que sucede cuando se busca cantidad en lugar de calidad en los resultados. El querer hacer las cosas 'a su forma' (que no siempre es la mejor) olvidando lo esencial, es un problema que también hay en Corea.
Ahora que China fue elegida sede de los juegos olímpicos en 2022 será un motivo para preocuparse en lugar de alegrarse, ya que con el déficit presente en la cuenta corriente, muy probablemente tendrán que rediseñar sus objetivos económicos en el corto plazo, su política fiscal y monetaria. así como cuidar las reservas si quieren hacer un evento como en el 2008, que ya con la devaluación del Yuan, comienza a complicarse.
Por último, habrá que ver si el pueblo chino lo aguanta, puesto que los seres humanos pueden acostumbrarse a todo, menos a comer. ¿Será que piensan hacer algo similar al 'Gran salto hacia adelante'? Por el bien de su pueblo, esperemos que no, puesto que crear apariencias es más costoso que pensarlas.
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